En silencio
llegan ocres y amarillos
y cae la hoja
en silencio, de puntillas,
con sigilo,
sin protesta ni queja,
se alejan por el oeste
las cenizas del estío,
callado
va menguando el día
cediéndole a la luna el sitio
y en vuelo mudo
abandona
la golondrina su nido,
es tiempo de cambiar la piel
sin hacer ruido.