A veces en mi soledad
oigo tu canto
y quisiera ser brisa
para entrar silenciosa
y envolverte en mi abrazo
y soplar suavemente
en tu nuca
y soplar suavemente
en tus labios,
a veces en mi soledad
miro a la luna
y encuentro tus ojos mirando
y me quedo perdida
en tus dunas
y me quedo perdida
en tus manos,
a veces en mi soledad
te extraño tanto
que recorro rincones antiguos
que conservan tu aroma lejano
y me dejo embriagar
los sentidos
y me dejo llevar
a tu lado.